domingo, 4 de mayo de 2014

LA HISTORIA EN UN PLATO

Rica en los más diversos ingredientes y técnicas, la gastronomía caraqueña es, en definitiva, la conjunción de sabores producto del mestizaje que caracteriza a sus habitantes. El plato de la capital es una mezcla balanceada de la tradición indígena de los pobladores originarios, la cocina clásica de los europeos y las especias traídas por los esclavos africanos, todos cocinados al fuego lento de más de 500 años de historia.

Cocina prehispánica
Arepa venezolana rellena de una de las
formas más populares de Caracas, con queso amarillo
Foto: venezuelatuya.com
Previa a la conquista, las tribus venezolanas vivían de una alimentación basada en el aprovechamiento de los cultivos locales. El maíz (choclo) y la yuca (mandioca) son los componentes principales de esta dieta fundamentada en su mayoría en productos vegetales y hoy en día son múltiples las recetas que aún se conservan y emplean.
Miguel Ángel Asturias llamó al habitante americano el “hombre de maíz”. De este producto se  obtiene la preparación que caracteriza a la cocina venezolana: la arepa. Este bollo redondeado, realizado con la harina resultante de la molienda del maíz, es asado y relleno de los más diversos ingredientes, o utilizado como pan en el acompañamiento de otros platos.
Casabe asado a la manera tradicional
sobre un budare.
Foto: Wikipedia
El casabe, una galleta crocante y en forma de disco que ha sido asada y secada al sol, es el producto de la harina de yuca y es en la actualidad, uno de los productos más codiciados para aquellos con regímenes alimenticios que no permiten el consumo de gluten.

Cocina colonial y mantuana
La llegada de los españoles, de la mano de Cristóbal Colón, representa la introducción a tierras venezolanas de los sabores más arraigados de la cocina europea y africana.
La incorporación de la carne de res y el pollo a la dieta venezolana, transformó por completo la culinaria local. Con su entrada al menú caraqueño nacen platos como el sancocho, un cocido o cazuela que integra estas proteínas con verduras y tubérculos propios de las tierras venezolanas y algunos cultivos importados.
El amplio repertorio de especias africanas cruzó el Atlántico en las naves esclavistas,
Sancocho de gallina
agregándole una inyección de sabor a los platos mediterráneos de los españoles en la forma de la pimienta, el clavo y la canela, ingredientes tan comunes en la actualidad en las despensas de Caracas. De esta inmigración debemos agradecer los guisos especiados empleados en un sinfín de platos y cuya inspiración se remonta a las diferentes formas que presenta el “tajín” en África.

Es en este período que surgen los platos que signan el día a día del venezolano contemporáneo. La llamada cocina mantuana, es la que tiene su origen en la ciudad de los techos rojos que nació y se expandió desde el siglo XVI, la que un 19 de abril dijo que no al poderío imperial y la que vio nacer al hombre que libertaría a la mitad de las naciones americanas.
El historiador Germán Carrera Damas comenta sobre el régimen alimenticio de este período lo siguiente:
“La formación del régimen alimentario criollo, que se opera a lo largo de los dos primeros siglos de conquista y colonización, pasa por tres etapas sucesivas, conducentes a su configuración, que si bien guardan un orden progresivo con respecto a su producto final, coexisten a lo largo del período, de acuerdo con la zona geográfica de que se trate. La primera, que puede llamarse alimentación de guerra o de conquista, se caracterizó por la violencia que impregnó los contactos iniciales entre europeos y americanos; la segunda, que denominaremos de implantación de patrones europeos, estuvo signada por el denotado intento del conquistador por producir su paisaje alimentario; y la última, que llamaremos de adaptación, tuvo como rasgo fundamental la mutua adopción, por parte de conquistadores y conquistado, de elementos de sus respectivos regímenes alimentarios y la inserción, por parte de los esclavos negros, de una cultura adicional.”

Culinaria del siglo XX
La gastronomía de la capital venezolana se enfrenta a una nueva transformación entrado ya el siglo XX. Entre los años 40 y 60 de este período, el país se encuentra en un nuevo proceso de mestizaje, el viejo continente está en guerra y Venezuela se promete como la tierra de las oportunidades para aquellos que lo han perdido todo.
Españoles, italianos, portugueses, franceses y alemanes representan el número más grande entre los arribos. A estos se les puede sumar grupos de griegos, sirios, turcos y libaneses que trajeron consigo los sabores del medio oriente.
Caracas se convirtió entonces en una ciudad cosmopolita, impulsada por el boom petrolero y llena de habitantes de los más diversos orígenes e historias. Se incorporan al menú platos representativos como la pasta, la bollería clásica francesa, los productos embutidos y los arroces condimentados.

Caracas para el sibarita moderno
Empanadas de maíz. Su variable relleno
las hace una gran protagonista de los
desayunos de Caracas
Como ciudad cosmopolita que es, Caracas se adapta a la velocidad con la que viaja el siglo XXI. La globalización no ha dejado atrás a la capital y la cultura de la comida rápida ha proliferado entre las calles de la urbe, pero entre las hamburgueserías con estilo venezolano y los puestos con empanadas de los más diversos rellenos se pueden encontrar espacios donde se desarrolla la nueva gastronomía caraqueña.
Haciendo una oda a lo “vintage”, el rescate de los platos tradicionales de la colonia en su forma más clásica reaparece en la mesa de los restaurantes, fusionados con ingredientes ajenos a las recetas originales e incorporando la tecnología de las cocinas del nuevo milenio.

sábado, 3 de mayo de 2014

Arepas: el pan de cada día

Venezuela somos todos - Diseño: Emilia Monteverde

La arepa, un pan aplanado y redondo hecho a base de maíz, es sin duda alguno el plato característico de la cocina venezolana y por supuesto de la ciudad de Caracas. Su consumo se remonta al período prehispánico hasta los aborígenes naturales de la zona y el primer registro documental de esta preparación data de mediados del siglo XVI en el texto "Viaje y descripción de las Indias (1539 - 1553)" escrito por el florentino Galeotto Cei.
"Hacen otra suerte de pan con el maíz a modo de tortillas, de un dedo de  grueso, redondas y grandes como un plato a la francesa, o poco más o menos, y las ponen a cocer en una tortera sobre el fuego, untándola con grasa para que no se peguen, volteándolas hasta que estén cocidas por ambos lados y a esta clase llaman areppas y algunos fecteguas."
La preparación original involucraba maíz pilado trabajado hasta obtener una masa maleable pero consistente que se cocía sobre planchas a la leña. En la actualidad se ha facilitado la preparación de este plato típico a través de la harina de maíz precocida, de textura mucho más fina y delicada que acelera el tiempo necesario de cocción.
Arepa asada en budare
El momento más popular para el consumo de este plato es el desayuno aunque pueden tomarse a cualquier hora del día. Los caraqueños aceptarán arepas rellenas de las más variables combinaciones para iniciar o concluir el día, sin nada para acompañar el almuerzo o como un medio para reponer fuerzas en medio de la noche y continuar la fiesta.
Entre los rellenos más populares en las "areperas", restaurantes especializados en la preparación y que en ocasiones funcionan 24 horas al día, se encuentran diferentes tipos de quesos frescos y madurados, carne sazonada y mechada, ensalada de pollo y aguacate o Reina Pepiada, caraotas o frijoles negros o pernil de cerdo desmenuzado. Las posibilidades son tantas como las personas que quieran disfrutar de la preparación, todas son válidas mientras se encuentren dentro de una arepa.


Ingredientes (para 4 arepas medianas):
2 tazas de agua tibia
1 cdta de sal
1 taza de harina de maíz precocida
Aceite

Preparación:
- Mezclar todos los ingredientes hasta formar una masa consistente y que mantenga la forma.
- Hacer 4 bollos redondos de masa y con las palmas de las manos aplanar hasta obtener una torta de alrededor de medio centímetro de grueso.
- Colocar las arepas sobre un budare o plancha caliente previamente cubierta con una ligera capa de
Arepa rellena de queso fresco rallado
aceite. Una vez doradas de ambos lados meter en el horno a 400º F por 20 minutos.*
- Una vez listas sacar del horno y acompañar con el relleno que más guste.

*Si prefiere puede cocerlas únicamente en el budare o plancha unos diez minutos por lado o freir en abundante aceite hasta que estén doradas.

Si desea darle un toque diferente y personal a las arepas puede añadir a la masa un poco de mantequilla, una pizca de azúcar e inclusive sustituir parte del agua por leche. También las puede hacer más nutritivas añadiendo avena, salvado de trigo, semillas de linaza o zanahoria rallada a la preparación.

viernes, 2 de mayo de 2014

Mamá Alicia, la de los desayunos

Mamá Alicia, como todos en el mercado la conocen, dedica sus días a su casa y a la preparación de las empanadas, arepas, hallacas y demás manjares que vende en el mercado sabatino de El Cigarral, al sureste de Caracas. Su carisma, amabilidad y energía hacen de su puesto uno de los más populares y en él no sólo toman su desayuno los vecinos que van de compras sino también los encargados de las ventas de frutas, vegetales, quesos y demás productos ofrecidos en el lugar.
Mamá Alicia, a sus 75 años, es un claro ejemplo de la buena disposición del Caraqueño y de la energía de los habitantes de la ciudad que la hacen un punto dinámico e imperdible en el mapa.




Mercado de Quinta Crespo

Ubicado en la parte sur de la Avenida Baralt en el centro de Caracas, el Mercado de Quinta Crespo es el más grande y antiguo de la capital. Fue fundado luego de que el 8 de junio de 1951 fuese clausurado el Mercado de San Jacinto que se encontraba en el mismo sitio y su nombre es un homenaje al Presidente Joaquín Crespo quien donara originalmente los terrenos donde se asienta. La construcción del edificio en el que aún reside este centro comercial, fue llevada a cabo durante el gobierno de Marcos Pérez Jiménez quien veía en la creación de mercados municipales una forma de diversificar la economía en la ciudad..
Entre las docenas de puestos del mercado se puede conseguir ventas de ropa, accesorios y artículos del hogar pero es la amplia variedad de ofertas culinarias la que caracteriza a este lugar. Los productos frescos están por doquier y además de las más coloridas frutas y vegetales hay pasillos enteros devotos a la venta de carne de res, cerdo, pescados, quesos nacionales e internacionales y puestos especializados en productos tradicionales indígenas.
Muchos de los dueños de los puestos de Quinta Crespo son aquellos que decidieron aprovechar la oportunidad de establecer un negocio tras inmigrar de Europa, otros son los herederos de estos primeros aventureros y entre sus anaqueles se consiguen productos delicatessen importados, bacalao portugués, aceitunas, anchoas y pimentones españoles en conserva y quesos italianos sellados al vacío son tan sólo algunas de las cosas que están disponibles.
El Mercado de Quinta Crespo abre todos los días y los horarios dependen de cada uno de los establecimientos pero es recomendado visitar por la mañana cuando los productos más frescos se encuentran en su mejor momento.

jueves, 1 de mayo de 2014

¿Cómo se hace el casabe?

El casabe de yuca (o simplemente casabe) es un pan ácimo (pan que se elabora sin levadura), crujiente, delgado y circular hecho de harina de yuca. Éste se pone a asar en un budare o a la plancha. Su producción y consumo se remonta a tiempos prehispánicos, siendo la yuca o mandioca junto al maíz, uno de los principales cultivos de la época precolombina. Debido a las posibilidades de conservación, el casabe era una de las fuentes fundamentales de alimentación de los indígenas del norte de América del Sur y era parte de la dieta tradicional de los habitantes nativos del Caribe.
 En Venezuela la confección de este alimento tradicional incorpora hoy cierta tecnología, como prensas mecanizadas y máquinas para el rallado o burenes para un mejor aprovechamiento del calor y permitir elaborar varias tortas a la vez.Actualmente es consumido en distintas zonas de Venezuela y existen varios tipos; hacia el sur del país se elabora una variedad más gruesa y hacia el llano una variedad más fina llamada cazabe "galleta" por su fragilidad al tacto.
Se puede comer solo o como acompañamiento de diferentes platos: con mojito o salsa, con cochino u otro tipo de carne o se come como si fuera pan. Las grandes tortas, de 60 cm a un metro de diámetro, se pican en pedazos como si fuera una galleta y es ideal para sustituir el pan tradicional por el manjar predilecto de los comensales que continuamente hacen régimen.
Aquí puedes ver un pequeño corto realizado por el Ministerio del Poder Popular para la Educación donde se explica detalladamente la elaboración de este producto.